Cada bobina está sellada en una bolsa con cremallera reutilizable con una bolsita de gel de sílice para controlar la humedad. La bolsa es colocada entonces en una caja de cartón para el envío. La bobina incluye un chip EEPROM que puede ser leído por cualquier dispositivo Robox ®. Este almacena los datos del material y las estadísticas de uso.
Cada bobina está sellada en una bolsa con cremallera reutilizable con una bolsita de gel de sílice para controlar la humedad. La bolsa es colocada entonces en una caja de cartón para el envío. La bobina incluye un chip EEPROM que puede ser leído por cualquier dispositivo Robox ®. Este almacena los datos del material y las estadísticas de uso.